El senador Marcelo Guinle (59% de los sufragios) fue el claro ganador en la primera encuesta de el comodorense de quién es el político más traidor a Comodoro Rivadavia. Con una clara ventaja sobre sus seguidores se consagro de punta a punta.
Sin dudas, Marcelo Guinle, es uno de los casos paradigmáticos en la política. Un político con excelente lobby mediático que lo ha llevado a ser un candidato reconocido por los electores.
En su extenso derrotero político ha visto rodar cabezas, como si de un juego de bowling se tratara. Los “popes” del PJ local recuerdan entre rondas de mates en el Concejo de Localidad, la traición de Marcelo en el año 1991, haciendo su bautismo de fuego con sus aliados del valle. El costo que pago en ese momento, fue muy bien remunerado por un senador valletano, que lo congratuló con un registro del automotor.
El senador “romano” siempre más ávido del mármol del senado que de la arena del pueblo. Fue protagonista de golpes de timón impensados, y supo reconocer las sombras y hacerlas jugar a su favor hasta hacer temblar al propio gobernador Mario Das Neves. Como cuando lanzó su “fantasmal” candidatura a intendente en el 2007, para negociar la diputación nacional para su delfín Mario Pais.
Increíblemente este santafecino supo ganarse un lugar en una sociedad, que nunca le han gustado los intrusos, “haciendo su juego” supo sembrar resentimientos en las bases que sangran por la traición sufrida en el año 1999.
En una ciudad dedicada al trabajo y no a la “rosca” política construyo su poder en base a sus dotes maquiavélicos que lo depositaron: primero en la intendencia 1995-1999 y segundo 6 años en el Senado mandato que renovó este año.
En los mentideros políticos aseguran que ahora estaría operando, para que Das Neves recomponga sus relaciones con la Casa Rosada, puesto que de esta forma él podría continuar en su cómodo equilibrio y no tendría que romper con los Kirchner.
